Así como en la vida, a las circunstancias hay que dejarlas ir, para que se desarrollen, para que se dirijan hacia su verdadera forma.
Y al soltarlas nos damos a nosotros mismos la forma que adquiriremos temporalmente, hasta que un nuevo hecho nos modifique, aún cuando la modificación sea la conciencia de que continuar en el mismo camino es la manera.
Seguís estando Juan. Sólo adhiero al crecimiento. Como vos...
miércoles, febrero 27, 2008
Suscribirse a:
Entradas (Atom)